Y si era EL. De negro como todos, justo atras mio.
Bello. Se reia de lejos y me hablaba cerquita. Pero la semana pasada se besaba sin culpa con otro Lindo igual que EL.
Y yo que lo miraba de reojo cada vez que podia. Yo queria sentirme diva, pero bastaba EL, sin siquiera moverse en medio de la pista, y ya se sabia Quien era la Diosa. La Presa. Y todas y todos, le mordisqueban el cuerpo con solo pensarlo.
Y el ambiente a ratos lugubre a ratos toxico. Y me toman la mano. Me dicen ven. I'M STRAIGHT. Y no me hacen caso. Me agarran de la cintura. Me hablan bajito. Y la mina quiere. Se le nota.
Y tocan Grace Jones. La maxima expresion de feromonas ambivalentes. Y las miradas de quien con quien. Y le agarro la mano firme al OTRO, para que ella se vaya. Mostarle que no. No juego. Cerrada Cartucha Hetero. Y el OTRO se desarma de la risa de esta pendeja de 24. Juega -me dice- Y NO. Y me agarra firme. Me mira complice. Pero sabe que NO. Porque sigue buscando a El. Lo vigila, lo secunda. Sin que se note. Porque en alguna dimension se pertenecen.
Y de repente las 5.00. Luces. Y llegan como patada en el rostro. El exceso de alcohol. Las repersusiones de las duras. Todos fuera. La otra cara del espejo y la noche. Y ellos se van.
Y les digo chao, les vuelo un beso. A los dos.
Y para el taxi.
Una senal desde adentro. Invitacion.
Gracias pero No. Sola y clara. Al menos con la conviccion.
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